Fetiche callejero es un enfermo con problemas mentales,  adicto a lo insano y lo desperfecto, que utiliza las técnicas de collage y el fotomontaje para justificar sus problemas con las adicciones y así fusiona las imágenes que extrae del gore, la propaganda publicitaria, insectos, guerras de trincheras, accidentes de transito y sectas atómicas, patológicas, delirios tecnocientíficos y dismórficos, pornografía malsana, corpus médicos industriales desviados y perros enfermos. 

Un recorte gráfico inquietante, pero colorido y a menudo divertido. Su trabajo se centra en yuxtaponer el cinismo humano, la muerte, el sarcasmo, la ironía y la burla, con los daños colaterales generados en la construcción del mismo.